***IMPORTANTE***
ESTA ENTRADA HA TARDADO TANTO EN SUBIRSE DEBIDO A QUE HEMOS TENIDO EL PC FUERA
DE COMBATE ESTA SEMANA.
Primer Campeonato de España de Ciclo Cross. He estado en más,
como Laredo, Zamora, Navia, Segorbe, Gijón… y aunque en este ultimo si corrí, pero
fue como promoción. Pero este año en Torrelavega, corría de verdad, como
cadete. Y con más ganas aún de las que tenia, ya que me habían seleccionado
para ir representando a Cantabria, junto con otros cinco cadetes más entre los
que se encontraban dos de los favoritos para ganar en esta categoría.
Desde la prueba previa al de España, que fue el Campeonato de
Cantabria, los organizadores habían cambiado alguna cosa, como meter curvas en
el velódromo Oscar Freire, dentro de “El Patatal”, un tronco a modo de tablón,
pero también cambió el terreno debido al clima, ya que estuvo lloviendo toda la
semana (finde incluido) y como no, se hizo barro, muuuucho barro.
DÍA
1 -Team Relay-
Para los que no sepan lo que es el Team Relay, es una prueba
de relevos, en los que las selecciones que participan, eligen a 6 corredores (1
fémina, 1 cadete, 1 junior, 1 sub-23, 1 elite y 1 máster), elijen su estrategia
sobre quien sale en cada momento. De
Cantabria salieron, Sandra Trevilla, Ramón Liaño, Unai Díaz, Gonzalo Inguanzo,
Adrián García e Ismael Esteban
La carrera fue muy emocionante.
Primero salió Sandra, que aunque la dejaron y la metieron terreno pero hizo el
segundo mejor tiempo entre las féminas a solo 9” de la primera, luego “Monchi”
comenzó la remontada, después Unai, y Gonzalo que saliendo quinto se puso
segundo, Adrián pasó al primero y luego Ismael mantuvo las distancias mientras
lideraba la prueba. Y así, por primera vez, Cantabria quedó Campeona de España
de Team Relay. Luego nos fuimos para casa, me preparé la maleta, cené y a
dormir.
Día
2 -Master, Féminas, Sub-23-
Me levanté pronto. No corría, pero fui a ver las
carreras. Corrían los máster 50-60 donde
se impusieron Miguel Ángel Taboada y Juan Carlos López, después los 40 donde
ganó el cántabro Pablo Gómez. Luego corrieron las féminas, donde se llevaron el
maillot de campeona Aida Nuño, Luisa Ibarrola y Magda Duran y después nos
fuimos a comer. Más tarde era el turno de los máster 30, donde se impuso Raúl
Ballester, seguido de José Luis Blanco y Sergio Sordo y después de los sub23,
donde mi amigo Adrian García (Gomur) se ganó el subcampeonato, después de la avería
del año pasado en contrameta que le dejó con la miel en los labios, ganaba
Felipe Orts y tercero hacía Mario Junquera.
Después de la carrera, cogí mis cosas y nos fuimos al hotel
Salldemar (Santillana del Mar), donde íbamos a dormir. Nos acomodamos y luego
fuimos a la posada Camino de Altamira a cenar. Cenamos bastante bien. Luego
volvimos al hotel. Estuvimos hablando y viendo el “Dakar” un rato hasta que nos
fuimos a la cama.
Día 3 -Cadetes, Junior, Elite-
Me levanté pronto, a las 6:45 de la mañana, me vestí, me
preparé la maleta y nos fuimos a desayunar. Mientras desayunábamos, aparecieron
los cadetes de la selección asturiana, donde estaba mi amigo Juanin. Volvimos
al hotel cogimos las cosas y nos marchamos al circuito.
Di unas vueltas al circuito, que estaba súper divertido. Había
mucho barro (que le hacía muy duro), y en las curvas se iba mucho. La arena estaba
más dura y se pasaba mejor. “La olla” (una empinada bajada que termina en un
salto) se había embarrado, y se había hecho una rodada que llevaba directamente
a un árbol. Las escaleras resbalaban mucho, y a veces hacían ventosa con las
zapatillas. Y sobre todo, la primera bajada (que estaba seguida de las primeras
escaleras), que estaba súper peligrosa. Se había embarrado mucho y se había
llevado la tierra del principio de la cuesta haciéndose un escalón, por lo que
si nos bajabas por donde debías, dabas con el plato. Hubo muchas caídas ahí.


Me preparé las cosas para correr, y nos montamos en los
rodillos. Rober San Emeterio y Jorge Lastra ponían apunto las bicis mientras
Cristina San Emeterio dirigía nuestro calentamiento. Acabé sudando pero estaba
muy bien. Nos dirigimos a la salida donde dimos unas vueltecitas hasta que nos
llamaron los árbitros.
La salida se hacía, colocando primero a los 15 primeros
componentes de la clasificación de la Copa de España, y luego por selecciones,
por filas todos los componentes de cada selección, según su puesto el año
pasado. La primera fue Galicia. Y después los que no iban seleccionados.
De mi selección yo iba el ultimo (claramente, no me iba a
poner delante de los otros cuando en las carreras me sacan un mundo), pero me
colé rápidamente, en cuanto el árbitro pitó entre muchos corredores, haciendo
una gran salida. Me encontraba bastante bien. Éramos ochenta y muchos y con
toda esa gente era una autentica locura. Había que ir con más de mil ojos,
porque te venían de todos los lados posibles, hasta desde los imposibles, jaja.
Subimos las escaleras, y el que tenía delante me dio un “bicicletazo”
literalmente. Tiró su bici hacia atrás con mucha fuerza, y me dio en toda la
cabeza. Me agarré donde pude porque me iba pa’bajo.

La bajada la pasé a pata, porque había demasiada gente para
hacerla montado. También el puente porque veía que la gente intentaba hacerlo
montado, y muchos no podían y había atasco. Fui corriendo lo pasé y arriba me
monté. Me quité mucha gente de encima y aproveche para coger mi ritmo de
carrera. Llegué a la cuesta que había antes de llegar a “La olla” y me bajé,
por el mismo motivo de antes. Llegué a la famosa bajada, e irónicamente, se me
fue la olla, porque me tiré por la cuesta grande en vez de por la escapatoria,
para entrar más lento y así evitar pararme en la montonera. Pero bajé, me los
llevé por delante y me caí. Y fui a levantarme, resbalé y me volví a caer. Fue
una caída graciosa, y pese a los nervios de carrera, me empecé a reír mientras
echaba a correr. Me hice un tramo largo corriendo, no merecía la pena montarme,
gastaría muchas fuerzas e iría más despacio. Me cogieron dos cántabros y fui
con ellos un rato atacándonos. Dejé atrás a uno de ellos y luego tuvo avería.
El otro era Adrian González del BigMat-Sallende (mi compañero de equipo). Nos
cogió también Julio Pérez, del Daessa Sport. Dejamos atrás a Adrian y tiramos
Julio y yo. Cogíamos a corredores todo el rato, otros nos cogían a nosotros.

Julio se me escapó un poco pero le volvi a echar mano. Iba delante mío en las
escaleras, pero fue a bajar la cuesta desmotado, le eché “huevos” y la bajé
montado y le pasé, cogimos a otro, a su rueda llegamos a la arena. Vi como
entraba, estaba decidido a pasársela montado, así que en cuanto el empezó a
pedalear un poco más lento, me bajé de un salto, bici al hombro y eché un
sprint corriendo y le dejé atrás y entonces oigo un ruido raro, miro mi bici y
veo que la palomilla de la rueda delantera estaba suelta, me bajé rápidamente
para apretarla, para evitar caídas tontas. Por culpa del barro la palomilla no
roscaba y tardé demasiado. Me pasó un grupo en el que iban Adrian y Julio. Y me
puse a rueda remontando poco a poco hasta que dejamos al grupo atrás y entré
solo con un madrileño, y Julio delante mío con otro. Y entré en 56º posición.




Luego les tocaba a los junior, donde se impuso Jokin Alberdi y
para finalizar los campeonatos de España, la categoría reina, los elites, que
en una reñida prueba, ganó Javier Ruiz de Larrinaga, delante de Kevin Suarez e
Ismael Esteban que dio un buen trompazo al empezar la carrera. Y contamos con
la participación de José Antonio Hermida.