Estaba
jugando en la plaza de la iglesia al fútbol
con unos amigos después de clase de confirmación. Iba yo solo con el
balón delante de mi portería, pise el balón y me caí para atrás, encima de una
compañera y con su pie me doble la muñeca, de repente sentí un dolor intenso, se
paró el partido y me fui con mi madre, se me fue pasando el dolor pero no podía
mover la mano.
Ese
día ya no entrene en Karate. Al día siguiente le dije a mi madre que si me
llevaba al médico porque me seguía doliendo, y al salir del cole por la tarde
fuimos al centro de salud a urgencias, esperamos un rato a que nos llamaran,
después de mirarme bien me dijo que podía tener un esguince, pero que mejor me
hacían placas en el hospital, y me mandaron para allá. Ya en el hospital me
hicieron las placas y me dijeron que era el tercer niño que iba esa tarde a
urgencias con la misma rotura y cuando dijo eso mi madre ya no puso buena cara.
Yo esperaba que si era un esguince, me vendaran un poco y me iba a entrenar con
el C.C.Colindres, pero me dijo que me iban a poner una escayola y casi empiezo
a llorar allí mismo, me había roto el radio. Lo pase muy mal por el disgusto de no poder correr en unas
semanas. Me pierdo las primeras carreras del Futurobike con las ganas que tenía
de empezar la temporada de montaña.
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